Nos encontramos en pleno verano y el termómetro no da tregua. Las olas de calor se suceden y cada vez son más intensas, algo que puede ser especialmente duro para aquellas personas que no tienen aire acondicionado o una buena climatización en casa.
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Junto con los tradicionales ventiladores y las persianas bajadas, hay una curiosa técnica casera que no requiere de mucha complejidad, pero que cada vez cuenta con más seguidores en redes sociales porque resulta muy efectiva para bajar la temperatura en interiores.
Así es el truco de la pinza en la ventana: sencillo y efectivo
Para realizar este truco tan solo es necesario colocar pinzas de la ropa en la parte superior de las cortinas. Cuando el sol incide sobre los cristales de las ventanas, suelen calentarse y transmiten dicho calor al aire del interior. Las cortinas, especialmente aquellas que son opacas, actúan como barrera, pero suelen dejar un pequeño hueco en la parte superior que permite al aire caliente colarse y repartirse por la habitación.
De este modo, no solo basta con poner la pinza en cualquier lugar. Para que sea efectivo, hay que colocar varias, entre dos y seis dependiendo del ancho de la ventana, en la unión entre la cortina y la barra o el riel. De este modo, nos aseguraremos de que el aire caliente no encuentre resquicios para escapar hacia el interior.
Las cortinas más recomendables son aquellas gruesas y opcacas. Los tejidos claros reflejan mejor la radiación solar, pero los oscuros suelen absorber más el calor, por lo que el sellado es relevante. Con el método, podremos ahorrar entre 2 y 4 grados, dependiendo de la orientación de la ventana, tipo de cristal o la hora del día. No resolverá por completo la climatización de la casa en episodios de calor extremo, pero al menos supone un alivio.
Como consejo para ganar en efectividad, se recomienda emplear pinzas de madera o plástico para evitar marcas o daños en los tejidos. También, realizar todo el proceso en horas frescas, puesto que el sellado limita la circulación natural del aire. Y, siempre, retirar las pinzas antes de lavar las cortinas y revisar su estado de forma periódica.
