Shane Ogden, de 38 años y Karelee Jordan, de 18, han sido arrestados por conducta sexual indebida al reconocer haber tenido relaciones con un perro. Aunque han sido puestos en libertad, pesa sobre ellos una orden criminal y deberán acudir a la corte de Macedon, en Wayne (NY) esta semana. De ser considerados culpables figurarían en la lista de delincuentes sexuales y podrían enfrentarse a un año de prisión.
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El delito se descubrió durante el curso de otra investigación por la que el hombre fue arrestado el pasado 30 de julio acusado de abuso infantil. El motivo fue la posesión de un vídeo en el que Shane aparecía teniendo relaciones sexuales con una mujer en presencia de una menor. La niña, con la que no hubo contacto, es la hija del acusado.
Durante el curso de las investigaciones se confiscó el teléfono de Ogden y se rastrearon sus mensajes. Fue entonces cuando se encontró la conversación entre Ogden y Jordan en la que hablaban de las prácticas sexuales a las que habían sometido al animal. No mostraban ningún tipo de remordimiento, pues ambos comentaron qué más querían hacerle al perro.
Otros casos similares durante este mes
Aunque parezca una locura, las prácticas sexuales de este tipo no son un caso aislado. Solo durante agosto de 2017 se han registrado varios comportamientos de zoofilia similar.
El 10 de agosto se desveló que 15 adolescentes marroquíes habían contraído la rabia al haber practicado sexo con una burra infectada con la enfermedad. Apenas días antes, fue noticia la muerte de un joven estadounidense a causa de intentar practicar sexo con una anaconda.
La realización de este tipo de actos constituye un delito, además de los evidentes dilemas morales que puede acarrear.
