Adiós a las molestas moscas en pleno verano. Con la llegada de las altas temperaturas, nos apetece estar cada vez más tiempo fuera de casa. Disfrutar de la playa o la piscina, pasar una jornada en el campo o un parque urbano. Son planes apetecibles, pero que se pueden ver empañados si una molesta mosca se decide a molestarnos.
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En esta época del año hay multitud de plagas que regresan a exteriores, pero también a exteriores. Las moscas proliferan en esta temporada porque el calor favorece su reproducción y supervivencia. Por el contrario, en invierno mueren por la acción del frío y falta de alimentos.
Además, en la época estival, los residuos orgánicos también se descomponen a mayor velocidad por el efecto del calor, mientras que los alimentos maduran con mayor rapidez y, por tanto, también se pudren antes. Por este motivo, las moscas tienen mayor comida disponible y proliferan con facilidad.
La esperanza de vida media de las moscas es de dos semanas. Sin embargo, en condiciones de vida muy óptimas para su supervivencia pueden llegar a alcanzar los dos meses. Durante esos 15 días de vida pueden poner 8.000 huevos, de los que la mitad serán hembras, que también pondrán 8.000 huevos cada una. De este modo, la especie se reproduce con gran rapidez y facilidad.
El truco viral para acabar con las moscas: solo necesitas papel de aluminio
Entre las técnicas para acabar con las moscas, hay una especialmente efectiva. Se trata de la técnica del papel de aluminio. Lo único que debemos hacer es llenar una bolsa transparente para congelador, con agua y trozos de papel de aluminio, para después cerrarla correctamente.
Si las moscas acceden por más de una ventana, hay que repetir el truco con varias bolsas. El siguiente paso, tan fácil como el anterior, será colgar las bolsas alrededor de las ventanas para ahuyentar a las moscas y que dejen en tranquilidad a todos los que están dentro de la vivienda.
La técnica tiene la misma efectividad que el empleo de CD en árboles para mantener alejados a los pájaros. Las moscas se quedan deslumbradas por el sol y la luz reflejada en las piezas de aluminio, y no entrarán en la casa porque están desorientadas.
Sin embargo, no tendrá eficacia si los insectos ya han accedido a la vivienda. En este caso se puede recurrir a otras trampas, como instalar plantas repelentes, fabricar trampas caseras o emplear repelentes disponibles comercialmente, así como mantener limpio el interior de la vivienda.
