La Sala Penal del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 8 años y 9 meses de prisión impuesta por la Audiencia Nacional al hombre que propuesto matar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en septimebre de 2018.
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Los hechos probados relatan que el hombre acusado se integró en un grupo de WhatsApp bajo el nombre de 'Terrasa por España' en el que, desde junio de 2018, mostró su total desacuerdo con la exhumación de los restos mortales del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos.
Los comentarios se fueron intensificando con el paso de los días y la diana se empezó a centrar en la figura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "dado que representaba como presidente del Gobierno la línea política que detestaba, fraguándose su rechazo a dicha persona y expresando su idea de acabar con su vida como forma de producir un cambio de rumbo en la vida política española".
De este modo, escribió en el chat el día 19 de agosto de 2018: "Al Sánchez hay que cazarlo como un cuerno -ciervo- y poner la cabeza en la chimenea. Tantos cazadores en España y ninguno tiene cojones. Solo matan pobres animalitos que no rompen España, a este hay que cazarlo".
Asesinato de Pedro Sánchez
En los hechos probados se señala que el 12 de septiembre se puso en contacto por privado en WhatsApp con la coordinadora de un partido político del Vallès en la creencia de que disponían de infraestructura para porporcionarles medios y contactos para lograr su propósito. Dicha formación no le prestó ninguna ayuda.
Los mensajes, en los que pedía una entrevista personal con miembros del partido, recogen sus palabras: "Necesito alguna ayuda y tienen que ser patriotas. Por eso no se puede hablar más que personalmente. Soy un francotirador y con un tiro preciso se acaba el Sánchez. Antes de que hunda del todo a España".
La interlocutora se dirigió en ese momento a una comisaría de los Mossos. El hombre fue detenido y en su vivienda familiar en Terrassa (Barcelona) se encontró un importante arsenal de armas. El Tribunal Supremo ha rechazado el recurso del acusado en su totalidad y confirma la sentencia, que ha emitido la Sala de Apelaciones de la Audiencia Nacional, que le condenó a 5 años de prisión por un delito de depósito de armas de guerra, así como 3 años y 9 meses por delitos de homicidio en grado de proposición.
La defensa del acusado había pedido anular la condena alegando que los mensajes eran "fantasías narcisistas" y que no tenía pensado llevar a cabo su amenaza. El Supremo señala que "es de todo razonable" que hubo "proposición seria para la comisión del homicidio" y apela a "la posesión de un arsenal de armas y municiones, aptas para su utilización, el entrenamiento personal del acusado en un club de tiro o la tenencia de la agenda del presidente".
