El Gobierno de España prepara la ley de consumo sostenible. Esta normativa impedirá la publicidad de combustibles fósiles, afectando a cualquier empresa de carbón y petróleo, pero también de aquellos transportes con alternativas menos contaminantes, como el tren o los vehículos eléctricos.
La normativa quiere favorecer la transición ecológica y supondrá un golpe a aquellas afirmaciones genéricas que se emplean a modo de 'postureo' en el sector. Además, se incluirán otras cuestiones, como un año adicional de garantía para productos reparados, facilidades para arreglos y una etiqueta de durabilidad, como recoge el diario El País.
Estas son las cuestiones que recoge el borrador que ha elaborado el Ministerio de Consumo, pero la norma sigue sujeta a negociaciones y podría variar. Se prevé que sea presentada en el Consejo de Ministros durante las próximas semanas y después tendrá que superar el trámite parlamentario.
Si todo sale adelante, se aprobará una legislación muy restrictiva sobre todo aquello vinculado a los combustibles fósiles, siguiendo el modelo de la ley antitabaco que entró en vigor en 2005 en la Unión Europea. Desde entonces, se han ido reduciendo los espacios donde se permite fumar, se ha eliminado toda la publicidad posible y ahora se está planteando un etiquetado genérico para ocultar las marcas comerciales de cada empresa del sector.

En todo caso, la propuesta contempla excepciones. Entre ellas, los productos relacionados con el gas natural, que a pesar de contaminante tiene un efecto menos perjudicial que el petróleo o carbón. También se contempla permitir anuncios de los combustibles renovables, que son elaborados en parte con vegetales como la soja o aceite de palma y son más benévolos con el planeta.
La norma también baraja la publicidad de aquellos productos o servicios de transporte que sean propulsados exclusivamente mediante carburantes fósiles, cuando existan alternativas de transporte que puedan impulsarse por fuentes de energía no fósil. En todo caso, no se cierra la posibilidad a continuar con la publicidad de vuelos o automóviles.
Durabilidad
La norma busca fomentar la transición ecológica y, por este motivo, también facilitará cuestiones como la reparación de electrodomésticos cuando estén fuera de garantía. Los productores deben tener un servicio técnico y de repuestos adecuado, así como mantener los repuestos durante 10 años después de la última fecha de fabricación, un plazo que ya se aplicaba a las piezas.
Además, se plantea que cualquier usuario que decida reparar un producto que todavía esté en garantía, que se extiende durante tres años, tendrá derecho a ampliar este plazo durante otro ejercicio más, extendiéndose hasta cuatro años en total. También se creará una plataforma digital para las reparaciones, en la que los consumidores pueden encontrar toda la información que necesiten.
También se contemplan los bienes con elementos digitales. Los productos deberán incorporar información sobre actualizaciones de software, quedando excluida la posibilidad de ocultar información sobre actualizaciones que afecten negativamente al funcionamiento de los productos.