Las pensiones en España son uno de los pilares del estado de bienestar. Además de contribuir a devolver el esfuerzo realizado en un claro proceso de solidaridad intergeneracional, son el sustento de muchas familias que encuentran problemas para llegar a fin de mes.
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Los colectivos con peores pensiones son aquellos que reciben la no contributiva, que se sitúa siempre en los límites inferiores de las cuantías. Pero estos ingresos son vitales para sostener a una parte importante de la población que, si no, encontraría serios problemas para enfrentarse a las dificultades habituales o lograr una mínima estabilidad económica.
Pero mantener una pensión no contributiva también requiere del cumplimiento de una serie de requisitos para todos los jubilados. Como recoge el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, es vital cumplir con una serie de indicaciones, incluyendo la actualización periódica de los datos personales y económicos.
La Seguridad Social exige que se comuniquen los cambios en los ingresos, la unidad familiar o la residencia. A pesar de que puede parecer un trámite innecesario, el incumplimiento de estos criterios puede suponer una suspensión inmediata de los pagos.
Qué requisitos son imprescindibles: puedes perder tu derecho a una pensión
El Gobierno contempla una serie de requisitos como imprescindibles para mantener una pensión. Uno de ellos es contar con ingresos superiores al límite permitido, por lo que cualquier incremento tanto personal o del hogar se debe comunicar cuanto antes.
Además, también se contemplan cuestiones como un cambio de residencia sin notificación, que puede conllevar a la pérdida del derecho a cobrar esta ayuda. Además, se exige actualizar siempre la documentación, y algunos papeles como los certificados fiscales o las declaraciones responsables se pueden requerir anualmente.
De este modo, los errores más habituales cuando se ha eliminado el derecho a cobrar una pensión son: tardanza en entregar certificados fiscales o declaraciones de ingresos, omisión de informar sobre nuevas personas en la unidad de convivencia o no comunicar la modificación de datos bancarios o de contacto.
Cuando no se cumplan estos requisitos, la Seguridad Social puede suspender la pensión automáticamente. Además, el cobro no se reanudará de forma inmediata, sino que exige solucionar el error, presentar la documentación correcta y esperar a la autorización del reintegro. Durante todos estos trámites permanecerás sin ingresos.
Para evitar estos problemas, es importante revisar que todos los datos permanecen actualizados, gestionar preferentemente a través de la sede electrónica mediante el sistema Cl@ve que ofrece mayor inmediatez y consultar cualquier problema con un asesor especializado en materia fiscal o laboral.
Además, hay que tener en cuenta que las oficinas de atención al ciudadano de la Seguridad Social, así como los servicios sociales autonómicos tienen un servicio de información y asesoramiento gratuito. Se puede recurrir a ellos en caso de duda o experimentar cualquier tipo de problema.
