Vuelven las tensiones entre Silvio Berlusconi y Giorgia Meloni, socios de la coalición de derechas vencedora de los comicios de septiembre en Italia, tras la filtración de unos audios del magnate en los que culpa a Volodímir Zelenski de la guerra de Ucrania y se declara amigo de Vladímir Putin, lo que complica las negociaciones para la formación de Gobierno en el país transalpino.
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"He retomado un poco las relaciones con Putin. Para mi cumpleaños me envió veinte botellas de vodka y una carta muy amable. Le contesté con botellas de Lambrusco y una carta igual de dulce", se escucha de air a Berlusconi, que señala que el presidente ruso le define como "el primero de sus cinco verdaderos amigos".
A estos audios les siguieron otros en los que le líder de la conservadora Forza Italia acusa a Ucrania de echar por tierra los acuerdos de paz de Minsk y a Zelenski de "triplicar los ataques a las repúblicas" de Donbás. "Entonces las dos repúblicas registran víctimas entre militares que alcanzan, según me dicen, los 5, 6 o 7.000 muertos. Llega Zelenski y triplica los ataques... Las repúblicas, desesperadas, mandan una delegación a Moscú y logran hablar con Putin", asegura.
"Dicen: '¡Vladimir, no sabemos qué hacer, defiendenos!'. Él es contrario a toda iniciativa, resiste, sufre una fuerte presión en toda Rusia. Entonces decide inventar una operación especial: las tropas debían entrar en Ucrania, alcanzar Kiev en una semana, quitar al Gobierno, a Zelenski y poner otro ya elegido por la minoría ucraniana de personas buenas y de sentido común", continúa.
Sin embargo, lamenta el tres veces primer ministro italiano, Kiev logró el apoyo económico y militar de Occidente: "Entró en Ucrania y se topó con una situación imprevista e impredecible de resistencia ucraniana, que el tercer día comenzó a recibir dinero y armas de Occidente. Y la guerra, en vez de ser una operación de dos semanas, devino en una de 200 años".
Crisis con Meloni
Estas palabras han enfurecido a Hermanos de Italia, la formación de extrema derecha liderada por Giorgia Meloni, ganadora de las elecciones del 25 de septiembre y previsiblemente próxima primera ministra italiana.
Hermanos de Italia se ha alineado firmemente con la OTAN y Kiev, pero las declaraciones de su multimillonario socio corren el riesgo de debilitar al próximo Gobierno que debería encabezar la propia Meloni. "Sobre una cosa he sido, soy y seré siempre clara: pretendo guiar un Ejecutivo con una línea política exterior clara e inequívoca. Italia forma parte, plenamente y con la cabeza alta, de Europa y de la Alianza Atlántica", avisó en un comunicado.
"Quien no esté de acuerdo con esto no podrá formar parte del Gobierno", ha advertido duramente, lanzando un claro mensaje a sus socios, la Forza Italia de Silvio Berlusconi y la Liga de Matteo Salvini, conocido admirador de Putin, a los que necesita para sumar una mayoría y formar Gobierno.
