El Reino Unido ha suspendido sus negociaciones para la firma de un acuerdo de libre comercio con Israel, ha convocado a su embajadora y ha anunciado nuevas sanciones contra los colonos en Cisjordania. La orden llega después de que el primer ministro británico, Keir Starmer, se haya mostrado horrorizado por la situación en la franja de Gaza.
El ejército de Israel ha anunciado una nueva operación militar en este territorio, que no pertenece a su soberanía, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha afirmado que su país se dispone a tomar el control total de Gaza durante la incursión militar.
Israel mantiene bloqueada la entrada de suministros médicos, alimentos y combustible en Gaza. Los expertos internacionales han advertido sobre el riesgo de una hambruna inminente. La reacción del gobierno de Tel Aviv a la suspensión no ha tardado.
"Si, debido a una obsesión antiisraelí y consideraciones políticas internas, el gobierno británico está dispuesto a perjudicar su propia economía, esa es su prerrogativa", ha declarado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores del país hebreo, Oren Marmorstein.
Fin al bloqueo humanitario
Desde el Ejecutivo británico, su ministro de Exteriores, David Lammy, ha declarado que la ofensiva militar no es el camino para lograr el regreso de los rehenes capturados por Hamás y ha pedido a Israel que ponga fin al bloqueo humanitario, así como ha condenado el "extremismo" de determinados sectores bajo el amparo de Netanyahu.

"No podemos quedarnos de brazos cruzados", ha defendido Lammy en el Parlamento, que considera que lo ocurrido supone "una afrenta a los valores del pueblo británico", por lo que considera urgente suspender todas las negociaciones encaminadas a un nuevo acuerdo de libre comercio.
Reino Unido también ha impuesto sanciones contra algunos grupos de colonos en Cisjordania, a los que vincula con actos de violencia contra palestinos. Las medidas se suman a las sanciones ya impuestas en 2024. La mayoría de países considera que los asentamientos judíos sobre territorios que Israel ocupa en Cisjordania, que están en plena expansión.