Cuando se configuró el primer Gobierno de coalición en España tras la investidura de Pedro Sánchez en enero de 2020, Carolina Darias pasó a ocupar el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, convirtiéndose así en la responsables de la redacción del Ejecutivo con las Comunidades Autónomas. Poco más de un año después y pandemia mediante, la canaria dejó su cartera para hacerse cargo de otra.
La salida de Salvador Illa del Gobierno para ser el candidato catalán del PSC en las elecciones obligó al presidente a remodelar su gabinete haciendo pequeños cambios. Así, Carolina Darias cogió el testigo al frente del Ministerio de Sanidad mientras que Miquel Iceta entró para ocuparse de Política Territorial.
Mientras Salvador Illa tuvo que hacerse cargo de los meses más duros de la pandemia del coronavirus ganándose en gran medida el respeto de todos los españoles, Carolina Darias no ha estado tan acertada acumulando varios fracasos y sonoros enfrentamientos con algunas Comunidades Autónomas que se han traducido en varapalos judiciales para la ministra.
Descontento de las CCAA
Desde que se levantó el estado de alarma el pasado 9 de mayo, la cogobernanza entre el Gobierno central y las Comunidades Autónomas se ha hecho más complicada. Algunas se quejan de que Darias se apoya cada vez más en la mayoría del Consejo Interterritorial de Sanidad -de comunidades socialistas- en lugar de buscar el consenso.
"Intento buscar siempre el consenso, es verdad que últimamente no voy a decir que está imposible, pero cada vez es más complicado", acabó reconociendo la ministra en el Senado.
Madrid se ha convertido en la punta de lanza de las críticas. Isabel Díaz Ayuso, la presidenta regional, ha decidido desempeñar el papel de oposición al Gobierno y afila las críticas ante cualquier propuesta de Sanidad. Andalucía, Castilla y León, Galicia y Murcia, también gobernadas por el PP, siguen la estela madrileña de las críticas, que también se alcanzan a otros territorios como Cataluña y País Vasco por lo que consideran una intromisión de Sanidad en sus competencias.
Plan fallido de hostelería y ocio nocturno
De cara al verano y cuando la incidencia del coronavirus ya están mejorando en España, Carolina Darias intentó organizar un plan de desescalada para la hostelería y el ocio nocturno en función de los datos epidemiológicos. Varias Comunidades Autónomas votaron en contra, pero la ministra insistió en que las normas serían de obligado cumplimiento, lo que llevó a algunos territorios a rebelarse.
Este plan incluso generó tensiones entre el Gobierno y el PNV, uno de sus socios más estables, que gobierna País Vasco, recordándole que quien "debe tomar decisiones" es quien tiene las competencias y está "sobre el terreno". Es decir, cada gobierno autonómico y no Darias. Más llamativo es el caso de La Rioja, gobernada por el PSOE, que si bien no lanzó críticas al plan de Sanidad, no cumplieron la normativa al entender que se trataba de una recomendación.
De nuevo Madrid volvió ser la voz más alta en contra de los planes de Sanidad, llevando la cuestión a la Audiencia Nacional que lo admitió a trámite dictando medidas cautelarísimas, lo que ha obligado a Darias a cambiar el discurso para evitar la judicialización de las normas contra la pandemia.
Así, desde Sanidad se estudian nuevas propuestas tratando de alcanzar un acuerdo con todas las Comunidades Autónomas. "A ver si es posible, espero que sí, estamos trabajando para caminar de la mano, porque siempre avanzando juntos vamos a avanzar más", expresó la ministra en el Senado.
La segunda dosis: ¿AstraZeneca o Pfizer?
Las dudas sobre la vacuna de AstraZeneca por el posible peligro de trombos obligó a cambiar los planes por lo que este compuesto pasó a estar recomendado solo para los mayores de 60 años. Sin embargo, la primera dosis ya había sido inoculada a menores de esta franja de edad, por lo que había que resolver qué pasaba con el segundo pinchazo.
Carolina Darias se ha empeñado en que recibieran la segunda de Pfizer y no de la misma marca amparándose en el ensayo clínico del Instituto de Salud Carlos III. Todo lo contrario a la recomendación de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), la opinión de sus propios expertos y la postura de varias Comunidades Autónomas de todo signo político.
Aunque en un principio, Darias logró aprobar la "pauta heteróloga", de AstraZeneca combinada con Pfizer, en un Consejo Interterritorial prácticamente dividido, esto apenas duró un día. La canaria tuvo que dar luz verde a las comunidades para que los ciudadanos menores de 60 años pudieran elegir de qué vacuna sería su segunda dosis. Pese a que el Ministerio de Sanidad ha seguido insistiendo en que lo óptimo era elegir la segunda dosis de Pfizer, más del 90% ha optado por recibir el segundo pinchazo también de AstraZeneca.
El descontento de los MIR
En mitad de todos estos problemas, ha estallado uno más en forma de conflicto profesional. Los futuros médicos, los MIR, se han puesto en pie de guerra en contra Sanidad por cambiar el sistema de elección de plaza.
Con el sistema vigente, los aspirantes eran llamados de forma presencial al Ministerio por el orden de su nota en las oposiciones. Allí, expresaban sus preferencias para elegir plaza. Este método les permitía seguir en tiempo real la elección del resto de aspirantes En cambio, ahora Sanidad plantea que esta elección sea telemática. Para ello, los aspirantes tendrán que rellenar un lista con sus preferencias, que puede llegar a ser de hasta casi 8.000 plazas en función del puesto que hayan sacado en la oposición. Los futuros médicos tendrán tres semanas para completar el listado y el Ministerio directamente adjudicará una plaza a cada aspirante, en función de su nota y sus preferencias.
Miles de MIR se han manifestado en la Puerta del Sol de Madrid y frente al Ministerio de Sanidad exigiendo la dimisión de Carolina Darias, que de momento no ha ofrecido una alternativa pero reconoce su preocupación por las protestas.
