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Ciencia

En el futuro los óvulos no necesitarán un hombre

¿Son prescindibles los hombres? Diversos estudios demuestran que el esperma podría tener los días contados y los óvulos no necesitarían espermatozoides para poder ser fecundados. Un salto que podría revolucionar la biología.

El futuro de la biología ha llegado. Podríamos situarnos ante uno de los grandes cambios de la Humanidad y nosotros estamos aquí, quejándonos de nimiedades y haciéndole preguntas a SimSimi. Estamos hablando sobre el futuro de la fecundación humana y el gran cambio que podría sufrir todo el proceso de concepción de nuevos seres humanos. ¿Está el género masculino en peligro de extinción? ¿Somos prescindibles?

Así podría ser a la vista de los estudios publicados durante los últimos años sobre ello. Los hombres podríamos estar mirando al abismo y este podría estar devolviéndonos la mirada. Y es que son múltiples las publicaciones que han demostrado que el esperma humano no es necesario para la fecundación de un óvulo. Para muestra los siguientes ejemplos.

¿Podríamos estar ante el futuro de la biología?
"¿Podríamos estar ante el futuro de la biología?"

Fecundación con células no reproductoras y fecundación entre dos óvulos

El primer paso ocurrió en 2001, cuando dos investigadores de la Universidad de Melbourne anunciaron que habían conseguido fertilizar el óvulo de un ratón hembra con células no reproductoras de otro ejemplar y no necesariamente con un espermatozoide. Este avance sin precedentes dejó sorprendida a toda la comunidad científica y supuso un comienzo en una investigación más profunda sobre la reproducción humana. Al parecer, el esperma del macho ya podría no ser necesario.

Para comentar otro avance extraordinario nos desplazamos hasta 2004. Hace ya 12 años, científicos de la Universidad de Tokio traspasaron una línea inimaginable. Crearon un ratón hembra a partir de dos óvulos sin fecundación, sin espermatozoides y, como es lógico, sin rastro de genes masculinos. Estos óvulos fueron modificados genéticamente para que los cromosomas se comportaran como si fueran masculinos. La publicación de este estudio sacudió los cimientos de la biología porque siendo sinceros, crear vida a partir de dos especies hembra es algo muy gordo.

Los experimentos demuestran que podríamos llegar a vivir sin espermatozoides naturales
"Los experimentos demuestran que podríamos llegar a vivir sin espermatozoides naturales"

El esperma artificial

En 2011 llegó otro cambio. Si no te fías mucho de la fecundación mediante otro óvulo u otra célula del cuerpo humano, puedes fiarte del estudio hecho por la Universidad de Yokohama (Japón). Estos científicos crearon espermatozoides en un laboratorio mediante células del testículo de los ratones (da cosica pero juramos que lo sacaron de ahí). O lo que es lo mismo, crearon espermatozoides sintéticos. Los espermatozoides eran completamente funcionales, un hecho que se llevaba persiguiendo durante cuatro décadas, y los ratones concebidos con este esperma artificial fueron completamente fértiles.

Un caso similar ocurrió hace escasas semanas en China. También se creó nuevo esperma artificial pero esta vez a raíz de células madre en vez de sacados de los testículos de ratones. Estos espermatozoides sintéticos son capaces de fecundar un óvulo mediante una inseminación in vitro. Eso sí, como curiosidad, no llevan cola o flagelo por lo que son incapaces de desplazarse. Estos dos últimos descubrimientos estaban concebidos y enfocados exclusivamente para hombres que no son fértiles o estériles, pero tras estos anuncios, la biología podría sorprendernos e ir un paso más allá, potenciando la reproducción de mujeres en solitario o, por qué no, entre parejas de lesbianas sin necesidad de un donante de esperma.

Hemos hablado de cuatro casos de los cuales dos, principalmente, no requieren un hombre para la fecundación, por lo que podríamos estar ante el futuro gran paso de la evolución humana. ¿Se puede sobrevivir sin hombres? ¿Está el género masculino en peligro? ¿Acaso somos necesarios? Todo apunta a que todos estos años de dominación masculina podrían estar viendo la luz al final del túnel.

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