Cuando somos adultos recordamos con nostalgia los años de estudiante. Aquel tiempo hoy tan lejano sin cargas laborales en el que te prometías estudiar poco a poco para llegar preparado al examen pero al final siempre te dabas el atracón empollando tres días antes. Pero lo mejor, sin duda, eran las vacaciones. Benditas vacaciones, benditos tres meses de verano, benditas semanas en Navidad y, por supuesto, bendita Semana Santa.
Con los años ya no recuerdas aquella sensación. A no ser, claro, que seas diputado, que entonces incluso se mejora. Como en España todos somos muy católicos apostólicos romanos de todos los santos, nuestros representantes públicos se han propuesto disfrutar bien de estos días de torrijas y oraciones. Así, desde el pasado 23 de marzo hasta el próximo 8 de abril, según publica El Español, casi todos los parlamentarios del congreso estarán de vacaciones.
Semanas sin apenas actividad
Hasta diecisiete días de asueto para los diputados, más que gran parte de los estudiantes esapañoles. Como es habitual, en Semana Santala agenda del Parlamento se vacía de actos. De esta manera, entre el lunes y el miércoles solo hubo dos reuniones de la Mesa de Portavoces de la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los Acuerdos del Pacto de Toledo. Desde el jueves es fetivo, pero es que el viernes anterior, el 23 de marzo, ya no hubo actividad tras los plenos y comisiones de los días anteriores.
Pero es que además la semana próxima tampoco habrá mucha actividad en el Congreso. Sin plenos y según puede leerse en la agencia oficial, solo hay programadas un reunión de la Comisión de Economía, Industria y Competitividad, en la que comparecerá el ministros de Economía Ramón Escolano, y dos sesiones de la Comisión de investigación sobre la crisis financiera.
La cita más relevante la próxima semana será la presentación de los Presupuestos Generales del Estado a cargo de Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda. Se trata de un acto protocolario al que acuden la presidenta del Congreso, Ana Pastor, y algunos miembros de la Mesa.
Así, los diputados que no formen parte de estas comisiones ni tengan que acudir a este acto protocolario, disfrutarán de diecisiete días ininterrumpidos de descanso. Y amén.
