El partido conservador de Coalición Nacional (Kokoomus) dirigido por Petteri Orpo ha ganado las elecciones generales de Finlandia, llevándose un 20,8% de los votos. Por detrás, con un 20,1%, ha quedado el partido de ultraderecha conocido como Verdaderos Finlandeses, presidido por Rikka Purra. En tercer lugar se encuentra, con un 19,9% de los votos, la presidenta y líder de los socialdemócratas, Sanna Marin. Finlandia deja así claro su cambio de tendencia hacia la derecha y el conservadurismo, tras una legislatura de izquierdas de cuatro años.
Kiitos luottamuksesta. ???? pic.twitter.com/qDckgBI1eZ
— Kokoomus (@kokoomus) April 2, 2023
Los resultados han dado claramente la razón a las encuestas de los últimos meses, las cuales otorgaban una clara victoria a las derechas. No obstante, esta victoria ha sido mucho más ajustada de lo que se esperaba, ya que entre los tres primeros partidos hay un 0,9% de diferencia en la división de votos.
De los 200 escaños del parlamento finlandés, 48 van para Coalición Nacional, 46 para el partido de Verdaderos Finlandeses y 43 para el Partido Socialdemócrata. Por detrás nos encontramos con el Partido del Centro, quienes por primera vez no han quedado primeros en ninguna de las regiones del país, y se han llevado 13 escaños. En quinto lugar se encuentran los ecologistas de la Liga Verde, con 13 escaños.
Al SDP de Sanna Marin le fue mejor de lo esperado en las encuestas, ganando tres escaños y un 2,2% más de votos que en las elecciones anteriores, aunque no ha sido suficiente para darle un segundo mandato a una de las presidentas más jóvenes del mundo.
Por su gestión de la pandemia y por la entrada de Finlandia en la OTAN, que tras el visto bueno de Turquía podría formalizarse esta semana, Marin ha recibido elogios de alrededor del mundo. Por otro lado, su llegada a la presidencia del país escandinavo no fue la más favorable, ya que asumió la presidencia tras la dimisión de Antti Rinne, el ganador de las elecciones de 2019, por su mala gestión de una huelga en la empresa estatal de correos.
Sin embargo, a pesar de su popularidad, el país sigue experimentando los efectos económicos negativos de la guerra en Ucrania, que han dominado gran parte de la conversación durante la campaña electoral. En 2022, la economía se contrajo 1,9%. Los opositores de Sanna Marin también se han encargado de subrayar que la deuda de Finlandia se ha disparado en los últimos cuatro años, situándose en el décimo lugar entre los 20 países de la zona euro, según Eurostat. "Hay una cuestión crucial y esa es la economía. Tenemos que arreglar nuestra economía, tenemos que hacer reformas para impulsarla hacia un crecimiento sostenible", afirmaba Petteri Orpo.
A pesar de los resultados obtenidos, Sanna Marin ha dejado clara su confianza en poder sacar adelante una coalición de Gobierno con la derecha, aunque asegura que las negociaciones no van a ser fáciles. "Mi partido ha ganado apoyos y tenemos más representantes en el Parlamento, así que, como líder del partido, estoy muy contenta", ha apuntado. Varios analistas políticos del país creen en la posibilidad que pueda ser nombrada como ministra de Exteriores.
Sydämellinen kiitos kaikille äänestäneille ?? pic.twitter.com/eehsJ7KNif
— Sosialidemokraatit (@Demarit) April 2, 2023
Coalición de derechas y el Partido de Centro
Por otro lado, Orpo ha mostrado su alegría por haber ganado los comicios. "¡Ha sido una gran victoria! El pueblo finlandés pide un cambio y ahora iniciaré las negociaciones para formar un nuevo Gobierno", ha expresado el líder de la derecha finlandesa. La suma de su partido al de la ultraderecha de Verdaderos Finlandeses, de Riikka Purra, acumularía 94 de los 200 escaños del parlamento, una cifra insuficiente para formar un Gobierno de coalición, por lo que dejaría en manos del Partido de Centro poder hacer realidad un ejecutivo de derechas.
Los dos partidos de la derecha comparten muchas ideas en el aspecto económico, difiriendo en otros temas como las políticas europeas, ya que la ultraderecha de Purra plantea un Fixit, queriendo sacar al país de la UE. Otra de las medidas que pretenden llevar a cabo es la prohibición de entrada a Finlandia de personas que provengan de países en desarrollo de fuera de la Unión Europea.
Otro de las cuestiones es el medioambiente. El hecho de que la gran cantidad de bosques de la nación nórdica ya no sirva como sumidero para compensar las emisiones de CO2 del sector industrial, como resultado de la tala agresiva, se ha convertido en un tema muy polémico. Verdaderos Finlandeses defiende no imponer restricciones a la tala de árboles, lo que se opone al objetivo de la legislatura anterior de que Finlandia alcance la neutralidad de carbono para el año 2035. Otras políticas ambientales polémicas, como la abolición del ministerio de el Medio Ambiente y la reducción de subsidios para apoyar la transición verde, también se mencionan en el programa del partido populista liderado por Purra.
