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"Es intocable": hablan las presuntas víctimas de acoso sexual de Plácido Domingo

Este domingo, el programa de La Sexta dirigido por Gonzo, habló con distintas víctimas de acoso sexual por parte del tenor español.

"Es intocable": hablan las presuntas víctimas de acoso sexual de Plácido Domingo

'Salvados', programa de laSexta, ha presentado un nuevo reportaje que recoge los testimonios de distintas víctimas, tanto en España como fuera de nuestro país, que aseguran haber sido víctimas de acoso sexual por parte de Plácido Domingo, el famoso tenor español. Esta ardua investigación ha durado un año y medio y recopila toda clase de nuevos casos y testimonios.

Esta entrega, que se titula 'Plácido, un secreto a voces', comienza en Washington, Estados Unidos, donde se ha entrevistado a la mezzosoprano Patricia Wulf, la primera mujer en desvelar los abusos del cantante. Wulf cuenta que, al rechazarlo, sentía miedo por su carrera profesional. "Tenía miedo de ir sola al coche las noches que el insistía mucho", explica. En cuanto a si sus compañeras de profesión lo sabían responde que sí, que "era bien sabido por todo el mundo". Si nadie hacía nada el respecto, comenta, era por su "poder", por todo el dinero que movía dentro de la ópera de Estados Unidos.

Otra de las víctimas que ha desvelado su nombre y apellidos ha sido Luz del Alba Rubio, soprano uruguaya que trabajó también con el tenor. Asegura que, a parte de los tocamientos y de las proposiciones desmedidas, hubo una noche que la invitó a su apartamento y se le "tiró encima"."Pensé, ¿este es el precio que hay que pagar? Si mi canto, mi talento, mi preparación no es suficiente, ¿tengo que hacer también esto para valer?", comenta entre lágrimas. "Hubieras podido hacer una bella carrera", cuenta que fue lo que dijo el tenor cuando le rechazó. "¿Ya te dejó claro que el haberle dicho que no significaba que te quedabas sin carrera profesional?", preguntó Gonzo, a lo que ella respondió "". Tras lo ocurrido, Rubio no volvió a subirse a un escenario ni en Washington ni en Los Ángeles. "Es un David contra Goliath", ha lamentado.

Otra de las entrevistadas es Debra Katz, abogada especializada en el movimiento #MeToo que fue quien defendió a las primeras mujeres que dieron la cara para sacar a la luz los abusos del cantante español. Asegura que a día de hoy la siguen llamando mujeres para desvelar nuevos abusos cometidos por el cantante. "El hecho de que no lo encarcelaran no absuelve décadas de acoso sexual", comenta la abogada.

El programa cuenta que, aunque ninguna de las acusaciones ha llevado a juicio a Plácido Domingo, tres investigaciones han sido las que han corroborado, con mas de 60 testimonios, que las situaciones de acoso existieron y se produjeron a lo largo de décadas. La primera fue realizada por la agencia de información Associated Press (AP), la segunda por la ópera de Los Ángeles y por último la del sindicato de músicos de la ópera de Estados Unidos (AGMA). Esta última confirmo que las denuncias hacia el tenor eran reales y que iban desde flirteos hasta proposiciones sexuales directas, ocurriendo "dentro y fuera del ámbito de trabajo".

La investigación en España

En el final del programa, dos redactoras cuentan cómo han contactado con 25 personas que han trabajado con el tenor para poder explicar el hecho de que no hayan aparecido denuncias en nuestro país. Varias de ellas aseguran haber vivido situaciones similares a las contadas en Estados Unidos. "Es un mundo donde ciertas personas tienen mucho poder".

Una de las víctimas por acoso sexual del cantante ha hablado delante de la cámara para contar su caso y que, al encontrarse todavía en activo, ha preferido permanecer oculta. Comenzó refiriéndose a una compañera suya que un día la llamó llorando: "La estaba llamando a todas horas y no sabía como había conseguido su teléfono. Quería ir a su hotel, comer con ella... Era una chica que tenía 23 años". También describe la primera vez que se sintió incomodada por Plácido Domingo: "Me preguntó si podía meter mi mano en el bolsillo de su pantalón. No sabía qué decir para no ofenderle".

Cuenta además cómo en plena función, en un fin de acto la besó en la boca, Wno tenía justificación ninguna dentro de la obra". En ningún momento se lo contó a sus superiores: "¿a quién se lo cuentas, quien te va a creer?".

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