Tras el polémico beso de Luis Rubiales hacia Jenni Hermoso durante la entrega de premios del Mundial de fútbol femenino, todas las críticas se han centrado en el presidente de la RFEF. Estas críticas han aumentado tras su discurso en la Asamblea Extraordinaria, en el que aseguró que no iba a dimitir.
A pesar de que la FIFA le ha inhabilitado durante 90 días, Rubiales ya ha acumulado varias denuncias, incluso por parte del Gobierno, quien está tratando de conseguir la suspensión definitiva del presidente. Sin embargo, este no es el primer escándalo que Rubiales ha acumulado desde que empezó en su puesto como presidente de la RFEF en 2018.
Despido a Julen Lopetegui
Julen Lopetegui era el seleccionador de España, hasta que en 2018 llegó a un acuerdo con el Real Madrid para ocupar su banquillo tras finalizar el mundial. Esta decisión no fue del agrado de Rubiales, quien decidió destituirle días antes del Mundial de Rusia 2018. Esto ocurrió el mismo año que tomó la presidencia de la RFEF.
En su lugar, Fernando Hierro ocupó el puesto de la selección, que cayó el octavos de final ante Rusia.
La Supercopa en Arabia
La Supercopa celebrada en Arabia Saudí estuvo rodeada de polémicas desde el primer momento, tanto por su formato como por el dinero que cobraban los participantes.
Sin embargo, lo que salpicó a Luis Rubiales fue que él, junto al ex jugador del Barça, Gerard Piqué, cobraron una comisión de hasta 24 millones de euros por el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí. Entre las principales pruebas que imputan al presidente de la RFEF, se encuentra un audio que envió a Piqué el 15 de septiembre de 2019: "Geri, enhorabuena. Y no me refiero ni al partidazo de ayer ni a tu gol. Me refiero a que ya son más de las 12 y por lo tanto ya es firme el acuerdo con Arabia Saudí. Un abrazo, gracias por todo y aquí estoy para lo que necesites".
El contrato incluía la participación del Real Madrid y del Barcelona, junto a otros dos equipos que participarían por una cuantía menor.
El viaje a Nueva York de Rubiales
Este es un escándalo en el que el presidente de la RFEF presuntamente simuló reuniones con la Major League Soccer (MLS) y Naciones Unidas para pasar seis días en Estados Unidos, todo ello a cargo de la Real Federación Española de Fútbol. El caso en el que el presidente estuvo acompañado de una pintora mejicana, sigue siendo investigado por la jueza encargada del caso.
Polémica con Tebas
Tras varios enfrentamientos de Rubiales con el presidente de LaLiga, Javier Tebas, la situación alcanzó su culmen cuando Tebas denunció al presidente de la RFEF por espionaje. Publicó un tuit en el que decía lo siguiente: "Rubiales me ha mandado este sábado a un falso denunciante que se ha presentado con uno de sus bolis-grabadora a grabar como reacciono a sus denuncias".
El presidente de LaLiga se dirigió a Rubiales: "la obsesión de este tipo por espiar y grabar a todo el mundo no para y no tiene límites", acusación que se hizo tras filtrarse los audios.
Esta no fue la única acusación de espionaje que ha recibido el presidente granadino. Llegó a ser acusado de almacenar unos supuestos audios de Pedro Sánchez desde 2018. A estos se suman supuestos audios comprometidos del ex ministro José Guirao y la ex secretaria de Estado Irene Lozano.
Acusaciones de Tamara Ramos
Tamara Ramos es la Directora General del sindicato Futbolistas ON, y lanzó fuertes acusaciones contra el presidente de la RFEF. "Delante de todos él, con la sorna que tiene de reírse, me decía `Venga a ver, que tú has venido a ponerte las rodilleras´ (...) "Me dijo `¿de qué color traes hoy la ropa interior?´".
Tras estas declaraciones, la RFEF cargó contra ella, negando lo que dijo y asegurando que tomarían medidas legales.
Las supuestas fiestas privadas del presidente de la RFEF
En el año 2022, el presidente de la RFEF fue acusado por Juan Rubiales ("tito Juan") de celebrar una fiesta clandestina en un chalet privado de Salobreña, Granada. Le acusó de hacer "orgías para el disfrute del presidente y su equipo más directo, pagando los gastos con tarjetas de empresa de la propia RFEF".
Ante estas acusaciones, el presidente aseguró que "eran unas jornadas de trabajo" que incluían a responsables de la Real Federación Española de Fútbol.
