Los dos influencers detenidos en Villa de Vallecas (Madrid) por la agresión sexual de cuatro menores de edad contaban con amplia popularidad en redes sociales. En su perfil de Instagram, Iván y José acumulaban más de 42.000 seguidores, donde también tenían sus respectivas cuentas personales (uno de ellos con más de 10.000 seguidores), y perfiles en TikTok y Facebook.
En el perfil que ambos mantenían, se publicaban todo tipo de vídeos, en los que aparecen entrevistando a los viandantes y contando anécdotas sobre fiestas, acciones que realizaban en plena calle o memes que habían grabado para su posterior difusión.
Sus publicaciones acumulan cientos de 'me gusta' y comentarios de todo tipo. En sus vídeos entrevistando a la gente realizaban preguntas diversas, como "quién es tu mujer perfecta", "qué bebida consumían" y multitud de vídeos en los que aparecen bebiendo una marca refresco energético específica, muy popular, de la que aseguran en una publicación no tener ningún contrato promocional.
Su perfil contiene multitud de vídeos, en los que acostumbran a interpelar a al gente con "pin-pon" o uno en el que aparece una fila de chicas, a las que uno de los protagonistas va descartando hasta que finalmente aparece su compañero con la bebida energética que mencionan en repetidas ocasiones: "Este sí, ven", espeta. Acumula casi 2.000 'me gusta' en su perfil. También otro de sus vídeos muestra a una joven en compañía de ambos, en bañador, y por el que acumulan más de 2.300 'me gusta'.
Detenidos en Madrid
Iván y José habrían utilizado estos contactos para elegir a sus víctimas, drogarlas y violarlas. Además, habrían grabado las agresiones que habrían cometido.
La Policía Nacional realizó un operativo de investigación en el que señala que los influencers llevaban a las jóvenes hasta una vivienda donde realizaban juegos con estupefacientes hasta anular su voluntad.
Grababan las agresiones sexuales utilizando sus dispositivos móviles y cámaras de seguridad que habían instalado en el domicilio para captar todo lo que ocurría.
La investigación comenzó el pasado mes de diciembre, cuando la Policía recibió un aviso en el que se informaba de la existencia de un domicilio en Villa de Vallecas en el que se podrían estar agrediendo a menores de edad.
También se señalaba que los supuestos autores eran dos hombres con multitud de seguidores en las redes sociales. Las víctimas señalaron que accedían al domicilio atraídas por su fama en redes sociales. En su interior, comenzaban a consumir diferentes sustancias y se las ofrecían a ellas para que también las consumieran.
