La mayoría de mascotas son capaces de detectar si sus humanos se encuentran enfermos. Al primer estornudo, de hecho, muchas pueden correr a acostarse a nuestro lado. Esto es lo que ha vivido Russell Jones, un hombre británico que se rompió la pierna durante un accidente doméstico, por lo que tuvo que ser escayolado.
Su perro Bill rápidamente fue consciente de que algo sucedía cuando le vio con aquel aspecto. El perro, asegura Russell, empezó a actuar de manera extraña al ver a su humano con ese aspecto y, sobre todo, con una característica sorprendente: empezó a cojear con una de sus patas.
El hombre se preocupó de inmediato, ya que pensó que el perro podría haber sufrido realmente algún tipo de accidente o que este síntoma podría representar la cara de algún tipo de enfermedad. Por ello no dudó en llevar al animal al veterinario para que le hiciesen algunas pruebas.
Sin embargo, lo que encontró le sorprendió antes que preocupó: en realidad, al perro no le sucedía nada, sino que en realidad estaba sintiendo pena por Russell y su pierna escayolará, por lo que había decidido empezar a cojear para solidarizarse con él.
"Le quiero"
Russell ha compartido la historia en redes sociales, donde rápidamente se ha viralizado con todo tipo de comentarios alabando el gesto del perro. "Me ha costado 300 libras en facturas del veterinario y rayos X, pero no le pasa nada: solo se compadece de mi. Le quiero", ha asegurado en un post escrito en un grupo de amantes de los animales de Facebook, donde ha compartido su historia.
