La llegada a la denominada como 'nueva normalidad' ha llevado a relajarse, en cierta medida, en las medidas de prevención frente al coronavirus. La sensación de que la crisis santiaria ha terminado o que ya no va a volver, se ha extendido en cierta medida.
Pero es falso. El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, lo confirma: "Todos queremos que esto termine. Todos queremos seguir con nuestras vidas. Pero la dura realidad es que ni tan siquiera estamos cerca del final. Aunque muchos países han hecho algunos progresos a nivel global, la pandemia del coronavrius en realidad se está acelerando", ha asegurado.
Durante los seis meses desde que China alertó del primer caso de coronavirus, se han alcanzado medio millón de fallecidos, casi 30.000 en España, además de diez millones de contagiados, cerca de 300.000 en nuestro país.
"La identificación temprana y la atención clínica salvan vidas. Hay que proporcionar oxígeno y dexametasona a personas con enfermedades graves y críticas para salvar vidas, así como prestar especial atención a los grupos de alto riesgo, incluidas las personas mayores en centros de atención a largo plazo, porque salva vidas. Japón ha hecho esto, ya que tiene una de las poblaciones más altas de personas mayores, pero su tasa de mortalidad es baja", ha replicado Tedros.
El director de la OMS destaca que el organismo revisará en las próximas semanas todas las prioridades de la pandemia, puesto que la evolución de la crisis sanitaria podría cambiar también las necesidades: "Ya hemos aprendido mucho sobre este virus, pero todavía hay mucho que no sabemos, y todavía hay herramientas que necesitamos".
La OMS pide "unidad" a la hora de afrontar la crisis sanitaria
Por todo ello, Tedros ha pedido a la población que colabore respetando las medidas de seguridad, que haya unidad en las naciones y solidaridad internacional a la hora de reequilibrar las desigualdades a la hora de afrontar la Covid-19.
"Necesitamos mayores reservas de resiliencia, paciencia, humildad y generosidad en los próximos meses. Ya hemos perdido mucho, pero no podemos perder la esperanza. Este es un momento para renovar nuestro compromiso de empoderar a las comunidades, suprimir la transmisión, salvar vidas, acelerar la investigación y el liderazgo político y moral", ha destacado Tedros.
La situación es especialmente preocupante en toda América, donde Estados Unidos y Brasil acumulan más de 3 millones y medios de casos de coronavirus; además del foco en el Mediterráneo oriental, con países como Siria o Libia donde la escasez de recursos puede ser devastadora.
