Un tribunal islámico del estado de Kano, al noroeste de Nigeria, ha condenado a muerte por lapidación a un hombre de 60 años al que ha sentenciado culpable por la violación de una niña de 12 años en el 2019. Él mismo acabó reconociendo los hechos, según recoge EFE.
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El acusado aceptó los cargos que se le imputaban en relación a la violación de la menor, la cual tuvo lugar en la aldea de Farsa, al norte de Kano. "El juez Ibrahim Sarki Yola condenó (a ser lapidado hasta la muerte) a Mati Audu después de que este confesara", dicta el veredicto.
Mati Audu tiene un plazo de 30 días para apelar. De acuerdo con el código penal de la sharia o ley islámica, la muerte por lapidación es la pena a cumplir por una violación en caso de que el violador sea una persona casada, como es el caso del condenado.
A la horca por blasfemia
Se trata de la segunda pena de muerte impuesta esta semana en la ciudad de Kano. El pasado lunes 10 de agosto un cantante fue sentenciado a la horca por blasfemar contra el profeta Mahoma en una de sus canciones.
El juicio generó una una gran polémica en el país afriano, de unos 200 millones de habitantes y compuesto por una mayoría musulmana en el norte y cristiana en el sur. Mientras diversos grupos de derechos humanos han criticado este fallo judicial, muchos musulmanes conservadores lo apoyan y creen que puede servir para evitar que otros cometan el mismo delito.
