Todo el mundo dice que "la primavera, la sangre altera", sin embargo, esta no es la única época del año en la que se nos revolucionan las hormonas y aumentan nuestras ganas de darle una alegría al cuerpo. Es cierto que durante el invierno disminuyen nuestras ganas de sexo, ya que nuestros niveles de serotonina caen a la par que aumentan los de melanina, razón por la que nos sentimos más cansados por culpa del menor número de horas de sol.
Pese a que en invierno desciende nuestra líbido, encontramos un páramo en esta época del año en el que damos rienda suelta a la lujuria: la navidad. Puede que estas fiestas sean momentos familiares, de comilonas y donde los niños son protagonistas, sin embargo, entre villancico y villancico, también nos da por sucumbir a los placeres de la carne y prueba de ello es que septiembre es el mes del año en el que más niños nacen.
¿Por qué sucede esto? ¿Cuáles son las razones por las que tenemos más ganas de sexo en Navidad? Según recoge El País, el Boston Medical Group, empresa dedicada a tratar problemas de salud sexual masculina, señala que existen siete claves.
1 Tiempo libre
Durante la etapa navideña desconectamos del trabajo, de la universidad y de las responsbailidades derivadas el día a día. Tenemos más tiempo libre que podemos dedicar al ocio, al placer y al disfrute personal, lo que incluye, por supuesto, el sexo. "El cuerpo y la mente entran en un estado de relajación que desemboca en más deseo y excitación", explican.
2 Afrodisiacos
Si por algo se caracterizan las navidades es por las copiosas comidas de las que disfrutamos. Nochebuena, Navidad, Fin de año, Año nuevo, noche de Reyes... Y en muchas mesas acaban apareciendo alimentos afrodisiacos, como las ostras. Así lo sostiene Pilar Munné, dietista-nutricionista y miembro de la Asociación Española de Dietistas y Nutricionistas (AEDN), asegurando que son "ricas en zinc, un mineral que resulta imprescindible tanto en la fabricación de esperma como para activar la testosterona y subir la libido".
3 El alcohol
Las bebidas alcoholicas son otro habitual en las fiestas navideñas. "Un consumo moderado, lo que equivaldría a menos de dos copas, produce sensaciones positivas como la desinhibición, creciendo la libido de los hombres y fomentando la excitación", aseguran desde el Boston Medical Group. Hay que beber con moderación, ya que un consumo excesiva causaría el efecto contrario.
4 Más afecto
Durante la navidad, pasamos más tiempo con la familia y con la pareja y aumentanlas muestras de cariño, lo que también desemboca en mayor pasión entre las sábanas. Respecto a los solteros, estas fiestas "son propicias para crear vínculos afectivos y deseo de liberación, que puede desembocar en una pasión que merece ser celebrada en la cama", explican desde el Boston Medical Group.
5 Ánimo festivo
El ánimo festivo de la Navidad repercute directamente en nuestras relaciones sexuales pues, tal y como señalan desde el Boston Medical Group, "el sexo depende del estado de ánimo colectivo en las sociedades humanas".
6 Regalos sexuales
No hay Navidad sin regalos y estos no solo están dirigidos al público infantil. Los juguetes para adultos también caben bajo el árbol y es que en estas fechas las tiendas eróticas hacen caja. Y claro, una vez abierto el regalo, hay que usarlo y disfrutar.
7 Más autoestima
"En las fechas navideñas las personas dedican más tiempo a cuidar su imagen para asistir a los eventos familiares o de amistad", afirman desde el Boston Medical Group. Arreglarnos nos da seguridad y, según explica esta empresa, hace que "estemos más abiertos a tener encuentros sexuales".
