Buscar
Usuario

Vida

Rechazada en una entrevista de trabajo por llevar velo: "Los clientes no quieren tratar con una persona como tú"

Laila Serroukh, musulmana española y estudiante de periodismo, fue vetada de una entrevista de trabajo por llevar hijab.

"Aparece una chica y me dice que buscan a gente con el pelo descubierto, que, si no estaba dispuesta a quitarme el velo", así empezaba la entrevista de trabajo que realizaron a Laila Serroukh, una estudiante de periodismo, fotógrafa y defensora feminista. Imaginaros la cara que tuvo que poner y sensación de rabia e impotencia que tuvo que recorrer su cuerpo. "Es un trabajo cara al público y los clientes no quieren tratar con una persona como tú", sentenciaba la entrevistadora.

Serroukh, en busca de un empleo veraniego, acudía a la llamada de una empresa que había contactado con ella a través de su perfil en CornerJob, donde en su foto de perfil sale con hijab. La sorpresa fue mayúscula cuando le pidieron que se lo tenía que quitar y, al declinar la propuesta, la chica le comentó que "pensaba que serías una de esas chicas marroquíes que están dispuestas a quitarse el velo por trabajo". La joven, que subió un video a su canal de YouTube, comenta que "es así como quiero que me vean y es así como quiero que me contraten".

"Así como quiero que me vean y es así como quiero que me contraten"

Video-denuncia de Laila en su canal de YouTube
"Video-denuncia de Laila en su canal de YouTube"

"Os digo una cosa: no vale la pena quitarse el hiyab. Nos discriminan. A lo mejor ellos no confían en el potencial de una chica como yo, pero yo sí creo en la formación y el futuro que tenemos", aconseja con rabia.

Además, Laila, relata en su video-denuncia que ni siquiera se ofrecieron a coger su currículum que literalmente se lo devolvieron y, a pesar de eso, dice que le comentaron que "la empresa es súper abierta, que me cogieron para no discriminar pero que a la hora de trabajar es imposible".

Esta historia llevó a Laila a compartirla en sus redes sociales (YouTube, Instagram, Twitter, ...) junto con el hashtag #UnaPersonaComoYo. Los apoyos hacia ella tardaron poco en hacerse notar. Una de las primeras fue Desirée Bela-Lobedde, la activista afro-feminista, que se hizo eco de este relato y lo compartió entre sus seguidores para dar visualización al suceso.

Amanda Figueras, periodista española y creyente del Corán, escribía el siguiente tweet: "¿La gente dando aplausos lentos porque las iraníes pueden ver a su selección de fútbol en el estadio es la misma que no quiere que #UnaPersonaComoYo trabaje con velo?  'Salvamos' a las musulmanas cuando están lejos o cuando es para que sean 'normales como nosotros' (sin velo)". La periodista dice que el caso de Laila no es un caso aislado que ella misma sufre esta discriminación constantemente.

El caso de Laila no es un caso aislado, hay muchos más

Fotografía de Laila en su cuenta de Instagram
"Fotografía de Laila en su cuenta de Instagram"

Según los datos de la Plataforma Ciudadana contra la Islamofobia la afirmación de Amanda Figueras tiene todo el sentido del mundo. Solo en 2017 hubo un total de 546 incidentes islamófobos: un 70% fueron on line y, el otro 30%, en la mayoría de los casos se dieron en Cataluña, Andalucía y en Madrid. Como dato revelador, el 44% de los sucesos totales se centró en mujeres.

De hecho, hay innumerables ejemplos como: Nora Baños, una catalana musulmana, que ha sufrido islamofobia en muchos ámbitos y contextos distintos; Khadija, profesora de infantil cuyos padres españoles se convirtieron al Islam, que dice haber trabajado en guarderías donde no la aceptan; o, Ana Saidi Rodríguez, que demandó a sus jefes por obligarla a vestir sin el velo.

Ellas explican que hay muchos prejuicios y presuposiciones con respecto al velo. Una opinión muy negativa sobre una opción que ellas eligen sin que nadie se la imponga. "No me mires así porque presupones que soy sumisa. Me lo puse voluntariamente a los 25 años. Tampoco soy una terrorista", dice Naima El Akil a El Mundo.

Artículos recomendados

Contenidos que te pueden interesar