Los países escandinavos nos tienen acostumbrados bien a la balada clásica o al pop bien producido la mayoría de los años. Lo común es encontrar esa voz femenina que sorprende o ese baladón que nos retrotrae a otro tiempo, pero hay veces que también se permiten sorpresas, como la de este año en Islandia.
Y es que hay veces que nada más ves una actuación sabes que va a tener futuro en Eurovisión, y algo así ha pasado con el grupo Dadi & Gagnamagnid y su 'Think About Things'. En pijama y con carisma a rebosar, la banda no solo ha conseguido un codiciado billete a Rotterdam en la final del clásico 'Songvakeppnin' islandés, sino que de camino llevan una canción que ya es viral hasta el punto de haberla hasta compartido Russell Crowe en Twitter. El fenómeno islandés pinta a acierto rotundo en Países Bajos.
Una canción para salvar el mundo
Al ver 'Think About Things' todo cambia respecto a la versión estudio que podemos oír en Spotify. Lo que es un tema bien producido, animado y lleno de sintetizadores con cierto toque ochentero, se convierte en una tribu de señores con sudaderas verdes que parecen pijamas y que se compenetran a la perfección entre ellos con bailes estrambóticos.
La primera reacción en muchos casos será la de considerarlos freaks, aunque al rato la canción se te pega y ya no hay quien la quite. 'Think About Things' es una canción en la que Dadi & Gagnamagnid reconoce venir del futuro para salvar el mundo con sus bailes. Tras su intento en 2017, donde quedaran segundos por detrás de Svala, los bailes para salvar la humanidad de la banda ya tendrán su hueco en Rotterdam y cuidado que no vengan con una victoria de regalo.
Superando a otras propuestas interesantes en la final como la de la banda rock Dimma o la también favorita Iva, Dadi & Gagnamagnid tienen la fuerza de las canciones que sorprenden a primera vista, siendo eso el punto más a favor para una canción en Eurovisión. Con el concepto completamente cerrado, poco más le hace falta a Dadi & Gagnamagnid que sus pijamas verdes, sus guitarras futuristas y sus bailes estrambóticos.
De esta manera, Islandia se quita las ataduras del pop clásico escandinavo, sumándose a Lituania en el saco de países que vienen a ser diferentes en Países Bajos. ¿Apuestas así valen una victoria? Si se entienden sí y, de momento, esta es viral.
