Buscar
Usuario

Noticias

Un policía enviado a arrestar a una mujer que había robado pañales acaba pagándoselos

El agente Mark Engravalle detuvo a la madre, que estaba acompañada por sus hijas descalzas, pero en lugar de arrestarla el hombre entró en el supermercado y pagó los 300 dólares en productos para bebé que ella había intentado llevarse.

La desesperación llevó a Sarah Robinson la pasada semana a intentar robar en un supermercado de Roeland Park, Kansas (Estados Unidos), pañales, zapatos y toallitas para bebé, como recoge Europa Press. Un agente de la policía fue enviado al lugar del suceso para detener a la mujer (madre de seis hijas, viuda desde 2012 y sin hogar fijo). No obstante, la historia dio un giro.

El agente Mark Engravalle detuvo a la madre en el aparcamiento del Walmart donde se había producido el robo. El policía vio entonces que las hijas de la mujer se paseaban descalzas, con los pies sucios, por el parking. Engravalle no pudo con la situación y decidió entrar a la tienda para abonar él mismo los 300 dólares que la mujer había cogido en productos para sus hijas.

Las hijas de la mujer andaban descalzas por el aparcamiento
"Las hijas de la mujer andaban descalzas por el aparcamiento"

Robinson: "No soy una mala madre"

El agente, que es padre de dos hijos, dijo que el acto cometido por la mujer no estaba bien y que iba en contra de la ley. Pero donde la legislación ve una delincuente, Engravalle vio "una madre pasando una muy mala racha".

El departamento de policía ha recibido, desde que la historia se hiciera conocida, más de 6.000 dolares que los ciudadanos han donado a la mujer a través de una iniciativa de la radio local. Así pues, no sería demasiado complicado para ella afrontar la multa que tendrá que pagar por su tentativa. "No soy una mala madre, solo he cometido errores", señaló ella.

'Los dos estábamos llorando, había comprensión mutua', dijo el agente
"'Los dos estábamos llorando, había comprensión mutua', dijo el agente"

Engravalle: "La mirada de sus hijas lo decía todo"

En declaraciones que El Huffington Post recoge, Robinson cuenta que es "realmente duro" no tener nada. "Los dos estábamos llorando, había comprensión mutua", relató el agente y añadió que la madre le dio las gracias, pero que "la mirada de sus hijas lo decía todo".

"Tratamos de hacer que Roeland Park sea diferente y esta es una prueba de ello", aseguró el jefe de la Policía del lugar. "Hizo algo que nunca olvidaré: nos ayudó cuando nadie lo había hecho", admitía por su parte la madre.

Artículos recomendados

Contenidos que te pueden interesar