Las especias o condimentos son un recurso muy habitual en nuestra cocina, puesto que permiten aportar color, sabor y olor a nuestros platos con un coste muy reducido y potenciales efectos positivos para nuestra salud. Pero una nueva alerta alimentaria enciende las alarmas ante algunos productos que están siendo retirados del mercado en estos momentos.
El producto afectado ha sido distribuido en España y el aviso se ha notificado a través de la Red de Alerta Alimentaria Europea (RASFF), relativo a la distribución de lotes de pimentón rojo en supermercados de nuestro país y otros territorios del Viejo Continente.
La alarma ha llegado a España después de que las autoridades sanitarias de Portugal hayan detectado la presencia extraordinariamente elevada de aflatoxinas en un lote de pimentón rojo que ha sido producido y distribuido en supermercados españoles y que está siendo retirado del mercado.
Los peligros de la contaminación con aflatoxinas: síntomas y enfermedades que genera
Las aflatoxinas son unas toxinas producidas por ciertos hongos que se utilizan en cultivos agrícolas pero que suponen un grave riesgo para la salud humana. El Instituto Nacional el Cáncer de Estados Unidos indica que exposición a las aflatoxinas se relaciona directamente con un incremento del riesgo de desarrollar cáncer de hígado.

La exposición a aflatoxinas en dosis elevadas puede llevar a un episodio de contaminación agudo conocido como aflatoxicosis. Se manifiesta con dolor abdominal severo, vómitos, diarrea, aumento del tamaño del hígado (Hepatomegalia), ictericia (color amarillento de piel y ojos), convulsiones e incluso coma o muerte.
Si esta exposición se produce de forma crónica, aunque sea a niveles bajos, también se corre un riesgo importante. Entre otra secuelas, se encuentra el daño hepático progresivo que puede derivar en cirrosis, supresión del sistema inmunológico, retraso en el crecimiento y desarrollo de los niños, infertilidad o cáncer hepático.
Los informes realizados tras el análisis del producto afectado por esta alerta alimentaria localizaron niveles de aflatoxinas muy superiores a los permitidos. Por este motivo, la Unión Europea ha ordenado la retirada del producto de todos los canales de distribución.