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Una turista británica: "Mis vacaciones en Benidorm fueron un infierno, había muchos españoles"

Freda Jackson ha llegado a asegurar que los españoles deberían veranear en otro país.

Lo que no pase en Benidorm... La ciudad alicantina es uno de los destinos turísticos por excelencia, tanto para españoles como para extranjeros. Sobre todo, los británicos aman Benidorm e incluso existe mucha población procedente de las islas instalada allí ya todo el año. 

Una de estas mujeres procedentes de Gran Bretaña es Freda Jackson. Según  denuncia, ha estado llorando y dice que sus vacaciones en Benidorm fueron un infierno por culpa de que 'había muchos españoles'. 

¿Por qué sus vacaciones fueron una ruina?

Según Jackson, una jubilada británica, los españoles deberían de irse a otro lugar para sus vacaciones. Y que lloró mucho cuando terminó su excursión de dos semanas en Benidorm, porque había estado en contacto con "muchos españoles".

Freda Jackson, que sufre problemas de movilidad, dice que el hotel estaba lleno de españoles groseros y que un día estuvieron a punto de derribarla.

Freda Jackson con su denuncia
"Freda Jackson con su denuncia"

Además, su cuidadora también narra lo mismo. Es decir, que el hotel estaba lleno de turistas españoles, que eran muy groseros y que ellas estaban muy nerviosas. Y también dice que otra noche un chico joven español casi la tira volando y no se disculpó.

Narra también en la denuncia que el entretenimiento del hotel estaba enfocado solo para españoles y vuelve a decir que por qué no se van a otro lugar de vacaciones.

Freda Jackson reservó en el Poseidon Playa, situado a las afueras de Benidorm, en el sureste de España, con una amiga en abril de 2017. Lo hizo gracias al operador de viajes Thomas Cook que le recomendó el hotel a pesar de encontrarse en una pendiente cuando pidió un acceso plano a tierra por sus problemas de movilidad.

Freda, que vive en Blackburn (Lancashire) dice que pagaron 1,133 £ (1.267 €) por las vacaciones. Y señala que jamás se había quejado en ninguno de sus viajes, pero denuncia que su visita a Benidorm fue un desastre de principio a fin por culpa de los nuestros conciudadanos, según narra ella.

Aunque también echa la culpa a Thomas Cook, su operador de viajes, dice que quién arruinó sus vacaciones fueron los españoles y el lugar. Dicen que arruinó sus vacaciones soñadas por las que tanto había luchado.

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